Guía de medidas de prevención para restaurantes con delivery

medidas de prevención

Si tu negocio continúa activo a través del envío de comida a domicilio, conocer las medidas preventivas te será útil para garantizar una entrega óptima y dar confianza a tus clientes.

La declaración del Estado de Alarma y la suspensión temporal de la mayoría de actividades económicas a causa del coronavirus han condicionado fuertemente el sector de la hostelería. A pesar de ello, no se han suprimido los repartos de comida a domicilio, ya que estos días llevan a cabo una tarea esencial. Hay que tener en cuenta que este tipo de servicio puede ser de una gran utilidad para las personas que cuentan con algún grado de dependencia, así como para aquellas que forman parte de los grupos de población con un mayor riesgo sanitario, como la gente mayor.

Así pues, los restaurantes pueden mantener, mientras dure el confinamiento, su servicio a domicilio, extremando, eso sí, las medidas de prevención. Este artículo se propone, precisamente, ofrecer consejos para que los establecimientos puedan garantizar la higiene y la seguridad tanto de los repartidores como de los compradores. Llevar a cabo esta actividad puede ser clave, en una situación como la actual, para algunos negocios, a fin de no paralizar del todo la actividad y poder registrar, por lo menos, algunas ganancias. Estos ingresos pueden ser fundamentales para afrontar los graves efectos económicos provocados por el coronavirus.

Equipar a los repartidores de los restaurantes con las protecciones pertinentes

En primer lugar, es imprescindible, para evitar los contagios, que los repartidores puedan trabajar con las protecciones higiénicas y sanitarias pertinentes. En este sentido, cabe destacar, claro está, antes que nada, la utilización de guantes y mascarillas, generalizada también entre la población.

En estas circunstancias, no obstante, se debe ir más allá todavía y proteger también, por ejemplo, las mochilas o materiales que los repartidores empleen para transportar la comida, que deben ser desinfectados de forma diaria. Por otro lado, también se aconseja recalcar a todos los repartidores la importancia de realizar lavados de manos intensos antes y después del servicio, así como facilitarles un buen gel desinfectante. Cuantas más medidas de prevención, mejor.

Hay que tener una especial cura con el embalaje

Teniendo en cuenta la rápida y efectiva propagación del coronavirus, es clave no solamente proteger a los repartidores, sino también ir con sumo cuidado con todo el material que se toque con las manos, como por ejemplo las bolsas. Hay que recordar, en esta línea, que el virus puede sobrevivir unas cuantas horas en las superficies.

Por este motivo, se recomienda que las bolsas de comida se cierren debidamente, y que el repartidor no las coja por las asas, sino por los laterales. Estas semanas, incluso, se recomienda que la protección de las bolsas de comida se lleve a cabo mediante algún tipo de precinto que consiga cerrar herméticamente el recipiente. Además, también es preferible, como medida de prevención adicional, que se desinfecte las bolsas antes de que las cojan los mismos repartidores, para garantizar la seguridad en todo el proceso de elaboración y entrega.

Mantener la distancia de seguridad con el cliente en todo momento

Otro de los factores básicos para cumplir con unas medidas de prevención estrictas, que protejan a los repartidores y a los clientes, es la distancia de seguridad. Según las autoridades, hay que guardar, como mínimo, entre 1,5 metros y 2 metros entre las personas, para minimizar el riesgo de contagio por coronavirus.

Una de las medidas que está funcionando mejor, estas semanas, en la entrega de pedidos, es todavía más rigurosa que la distancia mínima. Consiste en dejar la comida en la puerta de la vivienda del cliente. Y, si no es necesario efectuar el pago, llamar al timbre y abandonar la zona. De este modo se evita cualquier tipo de contacto interpersonal.

 

Los pagos, siempre con tarjeta

Para limitar las posibilidades de contagio, se recomienda que el pago del servicio se lleve a cabo por internet, previamente. Sea como sea, si no es posible esta opción, es mejor que, en todo caso, se realice mediante tarjeta. Hay que tener en cuenta que el dinero en efectivo implica el contacto interpersonal y un mayor riesgo. Se desaconseja, del mismo modo, la firma de albaranes. El objetivo, como ven, es evitar que repartidor y cliente tengan que interactuar físicamente.

Las medidas de prevención, prioritarias hacer frente al coronavirus

Las medidas de prevención planteadas en este artículo son ideas que pueden servir para reforzar la seguridad y la salud de las personas que estos días reparten o bien compran comida a domicilio. De este modo, los restaurantes pueden proseguir con una de sus actividades y garantizar, al mismo tiempo, la salud de todos.