El Ministerio de Sanidad ha publicado el pasado 16 de octubre el Informe del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias del Ministerio de Sanidad. En él se desglosan los brotes y casos positivos por Covid-19 desde el 25 de mayo de 2020.

Según este informe, menos del 3,5% de los casos diagnosticados se pueden atribuir al sector hostelero. Para poner estos datos en perspectiva, con unos 235.000 establecimientos abiertos, existen un 1,1 casos por cada 100 establecimientos; lo que significa que sólo una media de dos establecimientos de cada provincia han generado un brote.

Además, en contraposición con otros países, las cifras oficiales están en línea con las que han ofrecido países como Inglaterra y Holanda dentro del sector. En Inglaterra, representan poco más del 3% de los focos de contagio, mientras que en Holanda es del 3,8%.

Según la plataforma Juntos con la Hostelería, iniciativa de FIAB, Hostelería de España y AECOC, esto evidencia que los contagios y rebrotes en hostelería son prácticamente nulos en las últimas semanas. De hecho, apuntan también a un 0,9% de los contagios de las últimas semanas.

Las reuniones sociales en domicilios particulares tienen una incidencia mucho mayor, del 14,2%. Según estos datos, la hostelería supone una alternativa controlada y segura a las reuniones sociales, ya que permite a las personas reunirse con condiciones de seguridad y supervisión.

Paralelamente, según el último informe de las Mutuas de Accidente de Trabajo del 14 de octubre de 2020, el sector de la hostelería tiene un porcentaje de incidencia covid entre sus trabajadores del 5,35%.

La hostelería ha sido uno de los sectores que más ha sufrido la pandemia hasta ahora. Y se estima que 100.000 establecimientos cerrarán si se mantienen estas medidas, lo que conllevaría la pérdida de un millón de puestos de trabajo, al que se sumarían a los 400.000 empleos ya destruidos.

Un sector comprometido con las medidas sanitarias

El compromiso de este sector con la sociedad y con la emergencia sanitaria ha sido ejemplar. Los establecimientos hosteleros han hecho un gran esfuerzo para aplicar las medidas sanitarias y de aforo pertinentes. En esta nueva normalidad, son espacios muy vigilados por lo que las reuniones sociales pueden incluso tener mayores garantías que en domicilios particulares.

Para proteger al sector es fundamental que los gobiernos tengan estos datos en cuenta. Y también es necesario que establezcan planes de contención que incluyan medidas restrictivas a la actividad hostelera, pero que a la vez permitan desarrollar su actividad con la mayor protección y seguridad. Sobre todo teniendo en cuenta que dentro de poco llegará una de las épocas de mayor facturación en el sector: las Navidades.